Panecillos de San Antón

Panecillos de San Antón
Receta de panecillos de San Antón

En esta receta preparamos los clásicos panecillos de San Antón, una tradición muy arraigada en Madrid durante las fiestas de San Antón que se celebran el 17 de enero en honor a San Antonio Abad. Estos panecillos, también conocidos como panecillos del santo, son pequeños, redondos y esponjosos, con una característica cruz marcada en la superficie que simboliza el ritual del santo y su práctica de ayuno. Elaborarlos en casa permite disfrutar de su aroma a limón y anís recién horneados, recordando las festividades tradicionales y los sabores auténticos de la capital española.

Los panecillos de San Antón no solo son un dulce típico, sino que también forman parte de un ritual que los madrileños han seguido durante siglos, asociado a la protección de animales y la salud. Ya sea para preparar en casa o para comprar en panaderías durante las celebraciones, estos panecillos representan la esencia de la festividad. Siguiendo esta receta, podrás recrear en tu cocina la tradición de Madrid, integrando el sabor, la historia y el simbolismo de las fiestas de San Antón en cada bocado.

Información de la receta

  • Tiempo de preparación: 20 minutos
  • Tiempo de cocinado: 30 minutos
  • Tiempo total: 1 hora
  • Raciones: 10-12 panecillos
  • Categoría: Postre
  • Tipo de cocina: Española
  • Calorías por ración (kcal): 170 kcal

Ingredientes

  • 500 g de harina de trigo
  • 130 g de azúcar
  • 125 ml de aceite de oliva suave
  • 250 ml de leche
  • 2 huevos
  • Ralladura de un limón
  • Aroma de anís (unas gotas)
  • Medio sobre de levadura en polvo (aprox. 7 g)

Como hacer panecillos de San Antón

  1. Preparar la mezcla líquida: En un bol grande, añade un huevo entero y la clara del segundo huevo (reserva la yema para pintar los panecillos). Agrega el aceite de oliva, el azúcar y la ralladura de limón. Mezcla bien hasta que el azúcar se disuelva por completo y la mezcla esté homogénea.
  2. Incorporar leche y aroma de anís: Añade la leche y unas gotas de aroma de anís. Remueve hasta que todos los líquidos estén perfectamente integrados con la mezcla anterior, obteniendo una preparación suave y aromática.
  3. Tamizar la harina y preparar la levadura: Tamiza la harina y mézclala con la levadura en polvo. Esto garantizará una textura ligera y esponjosa en los panecillos.
  4. Formar la masa: Incorpora poco a poco la harina con levadura a la mezcla líquida, removiendo constantemente hasta obtener una masa homogénea que se despega de las manos con facilidad. Amasa ligeramente para asegurar consistencia.
  5. Dar forma a los panecillos: Divide la masa en porciones iguales. Forma bolas y aplánalas ligeramente con la palma de la mano o utiliza un molde circular para darles forma uniforme.
  6. Colocar en la bandeja y marcar la cruz: Dispón los panecillos sobre una bandeja de horno cubierta con papel vegetal, dejando un espacio pequeño entre cada uno. Con un cuchillo o utensilio punzante, dibuja una cruz en la superficie de cada panecillo.
  7. Pintar con yema de huevo: Bate la yema reservada y pinta la superficie de los panecillos para que adquieran un acabado dorado y brillante al hornearse.
  8. Primer horneado: levado suave: Precalienta el horno a 50 °C y coloca un recipiente con agua en una esquina. Hornea los panecillos a esta temperatura hasta que doblen su tamaño, lo que les dará esponjosidad.
  9. Segundo horneado: dorado final: Retira el recipiente con agua y sube la temperatura del horno a 200 °C. Hornea los panecillos hasta que estén dorados y cocidos por dentro, aproximadamente 15-20 minutos.
  10. Enfriar y servir: Deja enfriar los panecillos sobre una rejilla antes de servir. Se pueden disfrutar solos o acompañados de chocolate o mermelada, perfectos para fiestas y celebraciones tradicionales de San Antón.