Café asiático
En esta receta elaboramos un café asiático, una bebida de origen cartagenero que se ha popularizado en toda la región de Murcia. Su historia se remonta a la ciudad de Cartagena, donde los murcianos comenzaron a combinar café, leche condensada y diversos licores en un solo vaso, creando una experiencia única tanto en sabor como en presentación.
El café asiático se caracteriza por sus capas visibles, que se logran gracias a la distinta densidad de sus ingredientes. Para conseguir este efecto clásico, es fundamental añadirlos en el orden indicado. Esta bebida no solo destaca por su sabor intenso y dulce, sino también por su elegante presentación, convirtiéndola en una opción perfecta para disfrutar en cualquier momento. Su precio accesible y su tradición murciana la hacen un clásico imprescindible en la cultura cafetera de la región.
Información de la receta
- Tiempo de preparación: 10 minutos
- Tiempo de cocinado: 0 minutos
- Tiempo total: 10 minutos
- Raciones: 1 ración
- Categoría: Bebidas
- Tipo de cocina: Murciana
- Calorías por ración (kcal): 207 kcal
Ingredientes
- 50 ml de café expreso concentrado
- 50 ml de leche condensada
- 10 ml de brandy
- 10 ml de Licor 43
- 50 ml de leche entera
- Ralladura de limón al gusto
- Canela en polvo al gusto
- Granos de café para decorar
Como hacer café asiático
- Preparar el café expreso concentrado: Hacer un café expreso de 50 ml, corto y muy concentrado. Este café será la base del café asiático y debe tener un sabor intenso.
- Colocar la leche condensada: Verter 50 ml de leche condensada en un vaso de 150 ml. La leche condensada quedará en la base, creando la primera capa dulce y cremosa del café asiático.
- Añadir los licores: Agregar 10 ml de brandy y luego 10 ml de Licor 43 sobre la leche condensada. Los licores formarán la segunda y tercera capa sin mezclarse, creando el característico efecto de capas del café asiático.
- Incorporar el café expreso lentamente: Usando una cuchara volteada apoyada sobre el borde de la capa de Licor 43, verter lentamente el café expreso. Esto permite que el café forme una capa superior sin mezclarse con los licores y la leche condensada.
- Espumar la leche: Calentar 50 ml de leche sin llegar a hervir y batir hasta conseguir una espuma ligera y cremosa. Esta será la capa final que completa el café asiático.
- Añadir la espuma de leche: Colocar la espuma de leche sobre el café lentamente, llenando por completo el vaso y formando la cuarta capa del café asiático tradicional.
- Decorar y servir: Espolvorear canela en polvo, añadir un poco de ralladura de limón y colocar unos granos de café sobre la espuma. Servir inmediatamente para disfrutar del sabor auténtico y aromático del café asiático.