Rosquillas de San Froilán

Rosquillas de San Froilán
Receta de rosquillas de San Froilán

En esta receta preparamos las tradicionales Rosquillas de San Froilán, un dulce típico de León que se suele elaborar para celebrar la festividad de San Froilán el 5 de octubre.

A pesar de ser muy populares en la actualidad en la ciudad de León, la historia de las Rosquillas de San Froilán no se remonta a muchos años atrás. Fueron creadas en los años 80 por el maestro pastelero leonés Santiago Pérez de las confiterías "La Coyantina", pero no tuvieron éxito y dejaron de producirse.

Sin embargo, en los años 90, la Confitería Asturias recuperó la receta y esta vez tuvieron un gran éxito. Desde entonces, muchas pastelerías de la ciudad han adoptado la receta y se han convertido en un elemento imprescindible en la celebración del San Froilán leonés.

Ingredientes

  • 250 ml de leche
  • 75 gr de mantequilla
  • 3 huevos
  • 150 gr de harina
  • 20 ml de ron
  • 1 cucharada de azúcar
  • 1 pizca de sal

Para el glaseado

  • 125 gr de azúcar glas
  • 2 cucharadas de agua
  • Unas gotas de zumo de limón

Como hacer rosquillas de San Froilán

  1. Ponemos un cazo al fuego y vertemos la leche, junto con una cucharada de azúcar, la mantequilla y una pizca de sal. Mezclamos bien todos los ingredientes para que se combinen adecuadamente.
  2. Cuando la leche esté a punto de hervir, es el momento de agregar la harina de una sola vez. Es importante mezclar con fuerza para lograr la consistencia adecuada en la masa. Sabrás que la masa está lista cuando se desprenda fácilmente del cazo.
  3. Volcamos la masa a un bol y la dejamos reposar hasta que se enfríe un poco.
  4. Una vez que la masa se haya enfriado un poco, agregamos el ron y un huevo, mezclando bien. Después, agregamos el segundo huevo y mezclamos nuevamente, y finalmente agregamos el tercer huevo y mezclamos todo hasta obtener una masa un poco pegajosa, brillante y suave.
  5. Transfiere la masa a una manga pastelera con una boquilla gruesa. Para hacerlo más fácil, coloca la manga dentro de un vaso alto y agrega la masa hasta tener una cantidad suficiente.
  6. Cogemos un trozo grande de papel para hornear y colocamos la manga pastelera sobre él para formar círculos de masa con la separación adecuada entre ellos. Repetimos este proceso hasta que se haya utilizado toda la masa y luego recortamos el papel alrededor de cada rosquilla.
  7. En una sartén calentamos una buena cantidad de aceite de girasol. Cuando alcance la temperatura adecuada (pero sin humear), añadimos las rosquillas con el papel hacia arriba, y con el calor, el papel se soltará y lo retiraremos de la sartén. Después, les damos la vuelta para freírlas por ambos lados hasta que estén doradas.
  8. Una vez que las rosquillas estén hechas, las colocamos sobre un papel de cocina para que absorba el exceso de aceite y las dejamos enfriar.
  9. Preparamos el glaseado mezclando el azúcar glass en un bol con dos cucharadas de agua y unas gotas de zumo de limón. Removemos bien los ingredientes hasta obtener una consistencia uniforme.
  10. Cubrimos las rosquillas con el glaseado y las dejamos secar. Para evitar que se ablanden, es recomendable colocarlas en la rejilla del horno.