Tarta de San Prudencio

Tarta de San Prudencio
Receta de tarta de San Prudencio

En esta receta, vamos a preparar una deliciosa tarta de San Prudencio, una especialidad típica de Vitoria y Álava en el País Vasco. Esta tarta, que lleva el nombre del patrón de estas ciudades y que se celebra el 28 de abril, fue ideada hace más de tres décadas por pasteleros locales. Durante ese día, todas las pastelerías de la región se llenan con esta exquisita creación.

Se trata de una tarta asombrosa compuesta por dos capas de bizcocho genovés que se empapan con licor. En su centro, encontramos una capa de nata montada, mientras que la parte superior está cubierta con una generosa capa de crema de trufa y adornada con cacao en polvo.

Es importante mencionar que, en la versión original de la tarta, se utiliza una base de galleta sablé. Sin embargo, en esta receta hemos optado por omitirla para simplificar el proceso.

Ingredientes

Para el bizcocho

  • 120 gr de azúcar
  • 120 gr de harina
  • 4 huevos
  • Una pizca de sal

Para la crema de trufa

  • 500 ml de nata liquida
  • 100 gr de chocolate fondant
  • 60 gr de azúcar

Para la nata montada

  • 500 ml de nata liquida
  • 60 gr de azúcar

Para el montaje

  • 100 ml de licor Marc de Cava
  • 2 cucharadas de cacao en polvo

Como hacer tarta de San Prudencio

  1. Comencemos elaborando la crema de trufa. En un cazo a fuego suave, combinamos la nata líquida y el azúcar, removiendo ocasionalmente para que el azúcar se disuelva por completo.
  2. Cuando la nata empiece a hervir, retiramos el cazo del fuego y añadimos el chocolate previamente troceado. Dejamos que el calor de la nata derrita el chocolate y luego removemos hasta obtener una mezcla uniforme.
  3. Dejamos que esta mezcla se enfríe un poco y luego la transferimos a otro recipiente, que colocaremos en el frigorífico durante al menos cuatro horas para que se enfríe completamente.
  4. Mientras tanto, prepararemos el bizcocho. Comenzamos tamizando la harina junto con la sal. En un bol, batimos los huevos con el azúcar usando varillas durante unos 5 a 10 minutos, hasta que la mezcla haya triplicado su volumen y esté esponjosa.
  5. Agregamos la harina poco a poco, mezclando suavemente con movimientos envolventes usando una espátula, hasta que todo esté bien integrado y no queden grumos.
  6. Vertemos esta mezcla en un molde de 22 centímetros previamente engrasado y lo horneamos en el horno precalentado a 180 grados durante 25 minutos.
  7. Una vez que esté listo, lo sacamos del horno y lo dejamos enfriar sobre una rejilla. Una vez frío, desmoldamos el bizcocho y lo reservamos.
  8. Ahora montaremos la nata y para ello la verteremos en un bol, debe estar muy fría, y la empezaremos a batir con unas varillas a mano o con batidora.
  9. Cuando la nata esté medio montada vamos añadiendo gradualmente el azúcar mientras seguimos batiendo, hasta que la nata esté completamente montada y forme picos firmes que no se caen al darle la vuelta al bol. Reservamos en el frigorífico.
  10. Una vez que la crema de trufa esté fría, la montamos usando varillas y la volvemos a introducir en el frigorífico.
  11. Por último, procedemos a ensamblar la tarta. Cortamos el bizcocho en dos discos y colocamos uno de ellos en un aro de repostería, humedeciéndolo ligeramente con licor.
  12. Vertemos la nata montada sobre este disco y la alisamos con una espátula. Colocamos el otro disco encima y lo humedecemos nuevamente con licor.
  13. Vertemos la crema de trufa montada sobre el bizcocho superior, alisamos la superficie con la espátula y espolvoreamos cacao en polvo por encima.
  14. Finalmente, dejamos que la tarta repose en el frigorífico durante toda la noche para que se asiente. Al día siguiente, antes de servirla, retiramos el aro de repostería.