Chuletillas al sarmiento

Las chuletillas al sarmiento son una de las preparaciones más emblemáticas de La Rioja, especialmente populares en las reuniones familiares, celebraciones al aire libre y en cualquier restaurante tradicional de la zona. Este plato típico se elabora con chuletillas de cordero a la brasa, cocinadas sobre los sarmientos de vid que abundan en los viñedos riojanos. En localidades como Logroño o Haro, es común comer este manjar en fiestas populares y jornadas gastronómicas, donde el aroma ahumado de la vid seca impregna la carne, creando un sabor único que distingue a esta receta de otras formas de preparar el cordero.
Para disfrutar de unas auténticas chuletas de cordero al estilo riojano, se requiere paciencia y respeto por la tradición. La carne debe reposar antes de ponerse en la parrilla y, una vez encendida la gavilla de sarmientos, se colocan las piezas con cuidado para que se cocinen con el calor de las brasas. El resultado son chuletillas tiernas, doradas y llenas de matices, que reflejan la esencia de la cocina local. Ya sea en casa o en un restaurante de La Rioja, probar estas chuletas es una experiencia imprescindible para quienes desean conocer de cerca la cultura gastronómica de esta tierra vinícola.
Información de la receta
- Tiempo de preparación: 10 minutos (más 2 horas de reposo)
- Tiempo de cocinado: 6 minutos
- Tiempo total: 2 horas y 16 minutos
- Raciones: 4
- Categoría: Carnes
- Tipo de cocina: Riojana
- Calorías por ración (kcal): 420 kcal
Ingredientes
- 1 kg de chuletillas de cordero
- 1 gavilla de sarmientos secos (mínimo un año de antigüedad)
- Aceite de oliva para engrasar la parrilla
- Sal gruesa al gusto
Como hacer chuletillas al sarmiento
- Preparar la carne con antelación: Saca las chuletillas de cordero del frigorífico al menos dos horas antes de cocinarlas para que alcancen la temperatura ambiente. Este detalle es clave para conseguir una cocción uniforme y que la carne quede jugosa.
- Encender los sarmientos: Forma una buena cama con la gavilla de sarmientos y préndelos. Es importante que los sarmientos estén completamente secos, con al menos un año de reposo, para que ardan de manera uniforme y generen brasas estables sin producir exceso de humo.
- Engrasar y calentar la parrilla: Coloca la parrilla sobre los sarmientos y úntala con un poco de aceite de oliva. Deja que tome calor unos minutos, ya que el calor intenso ayuda tanto a desinfectarla como a desprender fácilmente cualquier resto de grasa o suciedad acumulada.
- Limpiar la parrilla correctamente: Cuando la parrilla esté bien caliente, límpiala frotando con papel de periódico o con un cepillo metálico resistente. Este paso asegura que las chuletillas no absorban sabores indeseados y evita que se peguen al cocinarlas.
- Colocar las chuletillas sobre las brasas: Con las brasas ya listas y sin llama, distribuye las chuletillas de cordero sobre la parrilla en una sola capa. No las amontones para que se cocinen de manera uniforme.
- Cocinar las chuletillas al punto perfecto: Deja que las chuletillas se hagan sin moverlas demasiado. Cocínalas aproximadamente 3 minutos por cada lado, hasta que estén doradas por fuera pero tiernas y jugosas por dentro. Evita pincharlas para no perder sus jugos naturales.
- Sazonar y servir al instante: Cuando estén en su punto, espolvorea sal gruesa por encima y retíralas de la parrilla. Sírvelas inmediatamente, recién hechas, para disfrutar al máximo de su aroma inconfundible y del sabor auténtico que aportan los sarmientos.