Migas canas

Migas canas
Receta de migas canas

En esta receta preparamos las tradicionales migas canas, un plato típico de Extremadura con profundas raíces pastoriles. Estas migas extremeñas se caracterizan por su color blanquecino, que adquieren al combinar el pan de varios días con la leche. La preparación de estas migas caseras es sencilla, pero requiere atención en el remojo del pan y en el dorado de los ajos para lograr una textura perfecta y un sabor auténtico que refleja la tradición gastronómica de la región.

Las migas canas se pueden disfrutar tanto frías como calientes, dependiendo de si se vierte leche caliente o fría, lo que afecta directamente a su consistencia y suavidad. Este plato versátil combina la sencillez de ingredientes cotidianos con la riqueza de la tradición culinaria extremeña, convirtiéndose en una opción ideal para desayunos, meriendas o postres ligeros. Prepararlas en casa garantiza un resultado auténtico, con migas caseras llenas de sabor y textura que evocan la cocina rural de Extremadura.

Información de la receta

  • Tiempo de preparación: 15 minutos (más reposo de una noche)
  • Tiempo de cocinado: 20 minutos
  • Tiempo total: 35 minutos (sin contar el reposo)
  • Raciones: 4
  • Categoría: Lácteos
  • Tipo de cocina: Extremeña
  • Calorías por ración (kcal): 250 kcal

Ingredientes

  • 150 g de pan de varios días
  • 300 ml de leche entera
  • 2 dientes de ajo
  • Aceite de oliva virgen extra
  • Agua
  • Sal al gusto

Como hacer migas canas

  1. Remojar el pan: La víspera, corta el pan en trozos pequeños y colócalo en un recipiente con agua y una pizca de sal. Cubre con film transparente y deja reposar toda la noche para que el pan se hidrate correctamente.
  2. Preparar el aceite y los ajos: Al día siguiente, calienta una sartén con un buen chorro de aceite de oliva. Añade los dientes de ajo y fríelos hasta que adquieran un color dorado y desprendan su aroma.
  3. Tostar las migas: Retira los ajos de la sartén y añade los trozos de pan remojado. Cocina a fuego medio, removiendo constantemente, hasta que las migas adquieran un tono dorado uniforme y una textura crujiente por fuera.
  4. Servir con leche: Coloca las migas en un plato hondo y vierte sobre ellas la leche fría o templada según tu preferencia. Para un resultado más cálido y esponjoso, calienta previamente la leche antes de verterla.