Blaiets

Blaiets
Receta de blaiets

En esta receta vamos a preparar los tradicionales blaiets de Reus, unas galletas deliciosas que combinan sabores suaves de limón y vainilla. Estas galletas destacan por llevar grabada la imagen de San Blas o Sant Blai, un detalle que las convierte en un dulce emblemático de la región catalana. Su elaboración requiere paciencia y cuidado, desde la selección de ingredientes hasta el amasado y el reposo de la masa en frío, garantizando una textura tierna y un sabor equilibrado. Gracias al uso del molde especial de San Blas, cada galleta adquiere su forma característica, manteniendo viva la tradición de esta festividad que se celebra cada 3 de febrero.

Al igual que las Cristines de Sant Blai, los blaiets de Reus se suelen llevar a la iglesia para ser bendecidos, siguiendo la tradición que busca proteger contra el dolor de garganta. Esta práctica resalta el valor cultural y religioso de la receta, además de su relevancia en la gastronomía local. Prepararlas en casa permite conservar la esencia artesanal de este dulce y disfrutar de su aroma y textura únicos. Con un cuidado horneado y la correcta aplicación del molde, cada galleta se convierte en un pequeño homenaje a la festividad, ideal para compartir en familia o regalar, manteniendo viva una tradición centenaria que une sabor y cultura en cada bocado.

Información de la receta

  • Tiempo de preparación: 2 horas 30 minutos
  • Tiempo de cocinado: 20 minutos
  • Tiempo total: 2 horas 50 minutos
  • Raciones: 25 unidades
  • Categoría: Repostería
  • Tipo de cocina: Catalana
  • Calorías por ración (kcal): 120 kcal

Ingredientes

  • 300 g de harina de trigo
  • 100 g de harina de almendra
  • 125 g de mantequilla a temperatura ambiente
  • 125 g de azúcar
  • 3 huevos grandes
  • Ralladura de medio limón
  • Medio sobre de levadura Royal (aprox. 6 g)

Como hacer blaiets

  1. Preparar las harinas y la levadura: Tamiza la harina de trigo junto con la harina de almendra y la levadura Royal en un bol grande. Mezcla bien para que los ingredientes secos queden uniformemente combinados. Esto asegura que la masa quede ligera y homogénea.
  2. Batir la mantequilla con el azúcar: En otro recipiente, bate la mantequilla a temperatura ambiente con el azúcar hasta obtener una mezcla blanca, cremosa y espumosa. Este paso es clave para que los blaiets queden tiernos y con buena textura.
  3. Incorporar los huevos y la ralladura de limón: Añade la ralladura de medio limón a la mezcla de mantequilla y azúcar. Agrega dos de los huevos, uno a la vez, batiendo bien después de cada adición hasta que estén completamente integrados. Esto aporta sabor y humedad a la masa.
  4. Integrar las harinas a la masa: Añade gradualmente la mezcla de harinas a la preparación húmeda, amasando con las manos hasta obtener una masa uniforme y suave. Evita trabajarla en exceso para no endurecer la masa.
  5. Refrigerar la masa: Forma una bola con la masa y envuélvela en film transparente. Refrigérala durante 2 horas como mínimo. Esto facilita el corte posterior y ayuda a que los blaiets mantengan su forma durante el horneado.
  6. Extender la masa: Retira la masa del refrigerador y colócala sobre una superficie ligeramente enharinada. Extiéndela con un rodillo hasta que tenga aproximadamente 3 centímetros de grosor. Este grosor es tradicional para los blaiets.
  7. Cortar la masa con el molde: Usa un molde especial de San Blas para marcar y cortar los blaiets. Colócalos en una bandeja de horno cubierta con papel sulfurizado, dejando un pequeño espacio entre cada galleta para que no se peguen.
  8. Pintar y hornear: Bate el huevo restante y pinta la superficie de cada blaiet para darle brillo y color dorado. Hornea en horno precalentado a 180 °C durante 15 a 20 minutos, o hasta que estén ligeramente dorados en la superficie.
  9. Enfriar y servir: Saca los blaiets del horno y colócalos sobre una rejilla hasta que se enfríen completamente. Una vez fríos, estarán listos para disfrutar como dulce tradicional de San Blas.