Barriguillas de vieja

Barriguillas de vieja
Receta de barriguillas de vieja

En esta receta preparamos barriguillas de vieja, un dulce típico de Jaén que se conserva en la tradición de pueblos como Los Villares. Este postre andaluz destaca por su textura esponjosa y su sabor delicado, que se obtiene tras una masa reposada y un cuidadoso proceso de fritura. Estas barriguillas se elaboran con ingredientes sencillos, como huevo, leche y harina, que permiten replicar la receta de forma fácil en casa. Además, su preparación respeta la receta original, garantizando un resultado fiel a la tradición local.

Este dulce típico de Jaén se sirve normalmente en el desayuno o la merienda, acompañado de café o chocolate caliente, potenciando su sabor dulce y aromático. Siguiendo esta receta andaluza, podrás sorprender a familiares y amigos con un postre casero lleno de historia y cultura local. La combinación de azúcar y canela al final del proceso añade un toque característico que distingue a estas barriguillas de vieja, convirtiéndolas en un imprescindible de la repostería tradicional de la provincia de Jaén.

Información de la receta

  • Tiempo de preparación: 10 minutos
  • Tiempo de cocinado: 20 minutos
  • Tiempo total: 30 minutos (sin contar el reposo)
  • Raciones: 4 porciones
  • Categoría: Postre
  • Tipo de cocina: Andaluza
  • Calorías por ración (kcal): 250 kcal

Ingredientes

  • 1 huevo grande
  • 250 ml de leche templada
  • 2 cucharadas de aceite de oliva
  • 2 cucharadas de harina de trigo tamizada
  • 1 sobre de gaseosa (tipo bicarbonato de soda para repostería)
  • 1 sobre de levadura en polvo
  • 1 pizca de sal
  • Aceite de oliva abundante para freír
  • Azúcar al gusto
  • Canela en polvo al gusto

Como hacer barriguillas

  1. Preparar la mezcla seca: En un bol grande, tamizamos la harina y añadimos el sobre de gaseosa, el sobre de levadura en polvo y una pizca de sal. Mezclamos bien todos los ingredientes secos para que se integren uniformemente.
  2. Mezclar los ingredientes líquidos: En otro bol, batimos ligeramente el huevo y añadimos la leche templada junto con las 2 cucharadas de aceite de oliva. Mezclamos hasta que la mezcla sea homogénea.
  3. Unir las mezclas: Poco a poco, vertemos los ingredientes líquidos sobre los secos, mezclando con una cuchara o espátula hasta obtener una masa uniforme. La masa debe ser suave y no pegajosa al tacto.
  4. Reposar la masa: Formamos una bola con la masa, cubrimos el bol con film transparente o un paño limpio, y dejamos reposar en el refrigerador durante toda la noche. Esto permite que la masa fermente ligeramente y adquiera esponjosidad.
  5. Estirar y cortar la masa: Al día siguiente, colocamos la masa sobre una superficie ligeramente enharinada y la estiramos con un rodillo hasta obtener un grosor aproximado de medio centímetro. Cortamos la masa en tiras o formas rectangulares de tamaño uniforme.
  6. Calentar el aceite: En una sartén profunda, calentamos abundante aceite de oliva a fuego alto. Es importante que el aceite esté bien caliente antes de freír para que las barriguillas se inflen correctamente.
  7. Freír las barriguillas: Colocamos los trozos de masa en el aceite caliente y freímos hasta que se hinchen y adquieran un color dorado por ambos lados. Es recomendable darles la vuelta con cuidado para que se cocinen de manera uniforme.
  8. Escurrir el exceso de aceite: Retiramos las barriguillas de la sartén con una espumadera y las colocamos sobre un plato con papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.
  9. Rebozar y servir: En un plato aparte, mezclamos azúcar con canela al gusto. Antes de que las barriguillas se enfríen por completo, las rebozamos en esta mezcla. Como alternativa opcional, se pueden bañar en chocolate derretido para una versión más dulce.