Farinosos
En esta receta, preparamos farinosos, un postre tradicional de Aragón, especialmente popular en zonas como la comarca de las Cinco Villas, Zaragoza y la provincia de Huesca. Este dulce se caracteriza por su masa tierna y su relleno aromático, que combina azúcar, canela y miel para ofrecer un sabor único que ha perdurado a lo largo de generaciones. Es un postre sencillo de preparar, ideal para compartir en reuniones familiares o para comprar en pastelerías locales que mantienen viva la tradición de la repostería aragonesa.
Aunque en esta versión hemos optado por un formato simple, en algunas zonas de Aragón se incorporan variaciones como añadir anís o fruta en el relleno, aportando matices distintos según la localidad. Los farinosos son perfectos para disfrutar tanto templados como a temperatura ambiente y representan un ejemplo claro de la riqueza gastronómica de Zaragoza y Huesca. Prepararlos en casa permite controlar los ingredientes y recrear un postre tradicional que conecta con la cultura culinaria de Aragón y su historia.
Información de la receta
- Tiempo de preparación: 30 minutos
- Tiempo de cocinado: 30 minutos
- Tiempo total: 1 hora
- Raciones: 12 unidades
- Categoría: Repostería
- Tipo de cocina: Aragonesa
- Calorías por ración (kcal): 290 kcal
Ingredientes
Para la masa
- 1,25 kg de harina de trigo
- 375 ml de aceite de oliva
- 250 ml de agua
- 90 g de azúcar
Para el relleno
- Azúcar al gusto para el relleno
- Canela molida al gusto
- Miel al gusto
- Aceite de oliva al gusto
- 1 huevo batido para pintar los dobladillos
Como hacer farinosos
- Preparar la mezcla líquida: Coloca en un cazo el aceite de oliva, el agua y el azúcar. Calienta a fuego medio hasta que la mezcla comience a hervir. Retira del fuego y deja enfriar hasta que esté templada.
- Elaborar la masa: Vierte la mezcla templada en un bol grande y añade la harina poco a poco. Mezcla con las manos hasta obtener una masa homogénea que no se pegue a los dedos.
- Amasar y reposar: Coloca la masa sobre una superficie ligeramente enharinada y amásala hasta que esté suave y flexible, lista para estirarla sin que se agriete. Luego, devuelve la masa al bol, cúbrela con un paño limpio y deja reposar 10 minutos.
- Dividir y estirar la masa: Tras el reposo, divide la masa en porciones individuales. Estira cada porción con un rodillo hasta formar rectángulos uniformes.
- Rellenar los farinosos: En el centro de cada rectángulo espolvorea azúcar y canela al gusto. Añade un chorrito de miel y un poco de aceite de oliva para darle sabor y jugosidad.
- Doblar y sellar: Dobla los cuatro lados de cada rectángulo hacia el centro y pinta los dobladillos con huevo batido para que se peguen. Espolvorea nuevamente azúcar y canela sobre la superficie para un acabado crujiente y aromático.
- Hornear los farinosos: Precalienta el horno a 180 ºC. Coloca los farinosos en una bandeja con papel de hornear y hornéalos durante 30 minutos aproximadamente, o hasta que estén dorados y crujientes.
- Enfriar y servir: Retira los farinosos del horno y deja enfriar sobre una rejilla. Se pueden disfrutar templados o a temperatura ambiente, acompañados de café o té.