Inchicapi

Inchicapi de gallina
Receta de Inchicapi de gallina tradicional

El Inchicapi o inchicapi de gallina es una sopa tradicional de la gastronomía peruana, originaria de la selva amazónica. Con un origen prehispánico, este plato combina historia, sabor y nutrición en cada porción. Su preparación incluye ingredientes autóctonos como gallina, maní tostado, yuca, choclo y sacha culantro, logrando una textura cremosa y un aroma intenso que lo hace único. Su consistencia espesa y los trozos generosos de verduras y carne lo convierten en un plato altamente nutritivo y reconfortante, ideal para celebraciones, reuniones familiares o simplemente para disfrutar de una comida llena de tradición.

Degustar inchicapi de gallina permite conectarse con la rica historia de la selva peruana, donde se preparaba originalmente para ocasiones especiales y fiestas. Su sabor profundo y su equilibrio entre cremosidad y textura lo han convertido en un tesoro culinario que merece reconocimiento más allá de Perú, ofreciendo a quien lo prueba una experiencia auténtica, deliciosa y reconfortante, perfecta para compartir y disfrutar en cualquier momento del año.

Información de la receta

  • Tiempo de preparación: 20 minutos
  • Tiempo de cocinado: 60 minutos
  • Tiempo total: 80 minutos
  • Raciones: 4-6 personas
  • Categoría: Sopa
  • Tipo de cocina: Peruano
  • Calorías por ración: 350 kcal

Ingredientes

  • 1 gallina cortada en presas (puede ser pollo)
  • ½ kilo de maní tostado, remojado y pelado
  • 1 cebolla roja picada
  • 3 dientes de ajo pelados
  • ¼ de taza de harina de maíz o ½ taza de precocido (aprox. 30–75 g)
  • ¼ de culantro o 20 hojas de sacha culantro (puede reemplazarse con cilantro)
  • 1 yuca mediana (aprox. 500–850 g), pelada y cortada en trozos
  • 1 choclo (maíz)
  • 4 huevos sancochados (opcional, para acompañar)
  • 2 cucharadas de aceite vegetal
  • 3 litros de agua
  • Sal, pimienta, orégano y laurel al gusto
  • 2 pizcas de palillo (opcional)

Como hacer Inchicapi

  1. Preparar el caldo base: Coloca la gallina en una olla grande junto con la cebolla, los ajos, laurel y sal. Agrega los 3 litros de agua y lleva a ebullición. Cocina a fuego medio durante unos 20 minutos. Es importante no dejar que hierva demasiado fuerte, para que la carne se mantenga tierna y el caldo claro. Si quieres acelerar la cocción y suavizar la carne, puedes usar una olla a presión, pero controla el tiempo para que la gallina no se deshaga.
  2. Licuar el maní: Mientras se cocina la gallina, toma un poco del caldo caliente y licúa con el maní tostado hasta obtener una pasta homogénea. Esta mezcla será la base cremosa que dará sabor y consistencia a la sopa. Recuerda que el maní puede levantar espuma y pegarse si se agrega directamente sin licuar antes, por eso es recomendable usar un poco de caldo para disolverlo.
  3. Incorporar el maní al caldo: Añade la pasta de maní al caldo donde se cocina la gallina. Remueve constantemente con una cuchara de madera para evitar que se pegue al fondo de la olla o se formen grumos. Mantén el fuego medio-bajo y deja cocinar por unos 20 minutos, hasta que los sabores se integren y la mezcla comience a espesar. Este paso es crucial para que la sopa tenga su textura cremosa característica.
  4. Agregar yuca y choclo: Incorpora los trozos de yuca y el choclo cortado en pedazos. Cocina a fuego medio hasta que la yuca esté blanda y el choclo tierno, aproximadamente 20 minutos más. La yuca muy cocida ayuda a espesar naturalmente la sopa, así que no escatimes en tiempo de cocción. Si deseas, puedes probar la textura de la yuca con un tenedor antes de continuar con los siguientes pasos.
  5. Preparar el sofrito de sabor (opcional): En una sartén pequeña, calienta el aceite y sofríe la cebolla, el ajo y el palillo por unos 5 minutos hasta que estén aromáticos y ligeramente dorados. Agrega el maní molido al sofrito y cocina un par de minutos más, añadiendo un poco del caldo si la mezcla se seca demasiado. Luego, incorpora esta preparación al caldo principal y mezcla bien. Esto intensifica el sabor y aporta un toque más tradicional y aromático.
  6. Espesar con harina de maíz (opcional para textura cremosa): Diluye la harina de maíz en un poco de agua fría hasta obtener un líquido homogéneo sin grumos. Añade poco a poco esta mezcla al caldo, revolviendo constantemente para evitar que se formen grumos o se pegue al fondo. Cocina cinco minutos más. Este paso le dará a la sopa la consistencia cremosa ideal, parecida a un locro, sin sobrecargarla.
  7. Ajustar sazón y añadir culantro: Prueba la sopa y ajusta con sal, pimienta y orégano al gusto. Finalmente, añade el culantro o sacha culantro picado. El aroma del culantro fresco es característico del inchicapi amazónico y da un sabor auténtico. No te saltes este detalle, ya que marca la diferencia frente a otras sopas de gallina.
  8. Servir y acompañar: Sirve en platos hondos colocando una presa de gallina, trozos de yuca y choclo. Puedes añadir un huevo sancochado si lo deseas. El inchicapi puede acompañarse con plátano verde cocido o arroz blanco, pero la sopa ya es muy saciante, así que generalmente no necesita un segundo plato. Disfruta caliente y asegúrate de que cada porción tenga un poco de todo para balancear sabores y texturas.