Ensalada rusa peruana

La Ensalada rusa peruana es un clásico de la gastronomía del Perú que destaca por su sabor, color y textura. Su historia se remonta a la ensaladilla rusa de origen europeo, pero con el tiempo se adaptó a los ingredientes locales, sustituyendo carnes como el venado por papa, zanahoria y arveja, creando una versión más ligera y nutritiva. Esta ensalada se ha convertido en un acompañamiento indispensable para platos como pollo rostizado, chuletas de cerdo a la parrilla y pavos navideños, aportando frescura y un toque casero a cualquier mesa. Su preparación es fácil, rápida y se adapta a diferentes ocasiones, desde comidas familiares hasta celebraciones especiales.
Además de ser deliciosa, la ensalada rusa peruana ofrece un excelente valor nutricional gracias a la combinación de verduras como la betarraga, vainita, choclo y arveja, aportando vitaminas, fibra y antioxidantes. Sus múltiples beneficios incluyen mejorar la digestión y fortalecer el organismo, mientras se disfruta de un plato colorido y apetitoso. Preparar la es muy sencillo y garantiza una opción saludable y vistosa para cualquier comida.
Información de la receta
- Tiempo de preparación: 15 minutos
- Tiempo de cocinado: 25 minutos
- Tiempo total: 40 minutos
- Raciones: 4 porciones
- Categoría: Acompañamiento
- Tipo de cocina: Peruana
- Calorías por ración: 180 kcal
Ingredientes
- 2 beterragas (remolachas) medianas
- 2 zanahorias medianas
- 3 papas medianas (de preferencia blancas o amarillas)
- 150 g de arvejas verdes (guisantes) peladas
- 150 g de vainitas (judías verdes) picadas
- 1/2 taza de choclo desgranado (opcional)
- 1 limón (su jugo)
- 1/2 taza de mayonesa casera o al gusto
- 2 cucharadas de perejil fresco picado
- Sal al gusto
- Pimienta negra al gusto
Como hacer Ensalada Rusa Peruana
- Cocinar la beterraga: Lava bien las beterragas, corta los extremos y cocínalas en agua con una pizca de sal durante unos 25–30 minutos o hasta que estén tiernas. Una vez cocidas, deja que se enfríen un poco, retira la piel y córtalas en cubos medianos. Si deseas que las beterragas no tiñan demasiado las otras verduras, puedes agregarlas al final al momento de mezclar. Este paso asegura que el color rojo intenso sea uniforme y atractivo.
- Cocinar las papas y zanahorias: Pela las papas y las zanahorias, córtalas en cubos medianos y cocínalas en agua con sal hasta que estén suaves pero firmes. Escurre y deja enfriar completamente. La textura de estas verduras es clave: deben mantenerse firmes para que la ensalada tenga cuerpo y no se vuelva puré.
- Preparar las vainitas y arvejas: Lava las vainitas, corta los extremos y pícalas en trozos medianos. Cocina las vainitas y las arvejas en agua hirviendo con sal por unos 5–7 minutos hasta que estén tiernas. Luego pásalas por agua fría o con hielo para mantener su color verde vibrante y conservar la frescura. Este contraste de colores hace que la ensalada sea más atractiva visualmente.
- Cocinar el choclo (opcional): Si deseas agregar choclo, hiérvelo unos minutos hasta que esté suave y luego deja enfriar. El choclo añade un toque dulce y un contraste de textura que muchas familias peruanas incluyen para darle más sabor y tradición al plato.
- Mezclar las verduras: En un bol grande, coloca todas las verduras cocidas y frías: papas, zanahorias, arvejas, vainitas y beterragas. Añade el jugo de limón, sal y pimienta al gusto, y mezcla suavemente. Mezclar con cuidado evita que las verduras se deshagan y mantiene una presentación atractiva.
- Incorporar la mayonesa: Agrega la mayonesa poco a poco, mezclando con cuidado para que se integre sin romper las verduras. Prueba y ajusta la sal y la pimienta si es necesario. La mayonesa casera aporta cremosidad y un sabor auténtico que distingue a la ensalada rusa peruana de otras versiones internacionales.
- Finalizar y servir: Añade el perejil picado por encima y refrigera la ensalada unos 15 minutos antes de servir para que los sabores se integren. Puedes presentarla como entrada fría o como acompañamiento de carnes, pollo frito o arroz. Decorar con rodajas de huevo duro o aceitunas negras es un toque tradicional que realza la presentación y el sabor.