Molletes guatemaltecos

Molletes Guatemaltecos
Receta de Molletes Guatemaltecos

Los molletes guatemaltecos son uno de los postres más tradicionales y queridos de Guatemala. Se preparan con un suave pan dulce relleno de un cremoso manjar de leche, bañado en miel de panela con especias aromáticas como canela, clavo y anís. Este delicioso postre combina texturas y sabores únicos que evocan la calidez del hogar y la tradición familiar. A diferencia de las torrejas guatemaltecas, los molletes van rellenos y su sabor es aún más intenso, convirtiéndose en el acompañamiento perfecto para una taza de café o chocolate caliente.

Su historia está profundamente ligada a las celebraciones religiosas y familiares, especialmente durante la Semana Santa y el Día de Todos los Santos. En estas fechas, los hogares se llenan del aroma dulce de la miel y la panela, símbolos de unión y memoria. Preparar molletes guatemaltecos es una forma deliciosa de mantener vivas las costumbres del país y compartir con orgullo los sabores más auténticos de Guatemala.

Información de la receta

  • Tiempo de preparación: 30 minutos
  • Tiempo de cocinado: 45 minutos
  • Tiempo total: 75 minutos
  • Raciones: 8 porciones
  • Categoría: Postre
  • Tipo de cocina: Guatemalteca
  • Calorías por ración: 320 kcal

Ingredientes

Para los molletes

  • 8 molletes o panes dulces pequeños (también puedes usar conchas suaves)
  • 4 huevos (separadas claras y yemas)
  • 2 cucharadas de harina
  • 1 cucharada de azúcar
  • 1 taza de pasas
  • 2 tazas de aceite vegetal para freír
  • Azúcar roja para decorar (opcional)

Para el manjar

  • 3 tazas de leche entera
  • 6 cucharadas de maicena (fécula de maíz)
  • ½ taza de azúcar
  • 1 raja de canela
  • 1 pizca de sal
  • 1 cucharadita de vainilla

Para la meil de panela

  • 2 bloques de panela o 2 tazas de azúcar morena
  • 4 tazas de agua
  • 1 raja de canela
  • ½ cucharadita de pimienta gorda (4 o 5 bolitas)
  • ½ cucharadita de clavos de olor
  • 2 estrellas de anís
  • Cáscara o ralladura de 1 limón
  • ¼ taza de ron oscuro (opcional)

Como hacer Molletes Guatemaltecos

  1. Preparar el Manjar: En una olla mezcla la leche, el azúcar, la maicena, la canela y la pizca de sal. Cocina a fuego medio, removiendo constantemente con una cuchara de madera para evitar que se pegue o forme grumos. Cuando note que empieza a espesar, reduce el fuego y continúa moviendo hasta obtener una consistencia cremosa, similar a la de un pudín. Retira del fuego, agrega la vainilla y mezcla bien. Deja enfriar completamente antes de usar. Es importante no dejar de moverlo durante la cocción, ya que el manjar puede pegarse fácilmente. Este paso define la textura y el sabor del relleno, así que tómate tu tiempo para lograr un manjar suave y brillante.
  2. Preparar los Molletes: Corta una tapa en la parte superior de cada pan dulce, formando una especie de 'tapadera'. Con una cuchara pequeña, retira parte de la miga del centro para crear un hueco, sin romper la base del pan. Rellena cada mollete con una cucharada de manjar y unas cuantas pasas. Luego coloca la tapa nuevamente, presionando suavemente para sellar. Es importante no llenar demasiado el pan, ya que durante la fritura el huevo lo cubrirá y un exceso de relleno podría salirse.
  3. Rebozar con Huevo: Separa las claras de los huevos y bátelas a punto de nieve, hasta que estén firmes y esponjosas. Luego añade las yemas, el azúcar y la harina, mezclando suavemente hasta obtener una masa ligera y aireada. Esta mezcla es la clave para que el mollete quede con una capa dorada y esponjosa. No batas en exceso después de incorporar las yemas para evitar que pierda volumen. Este batido es similar al de las torrejas, pero un poco más espeso para cubrir bien el pan relleno.
  4. Freír los Molletes: Calienta suficiente aceite en una sartén profunda a fuego medio. Cuando esté caliente, toma cada mollete, sumérgelo completamente en la mezcla de huevo y fríelo con cuidado. Cocina por ambos lados hasta que estén dorados, aproximadamente un minuto por lado. Sácalos con una espumadera y colócalos sobre papel absorbente o en un colador para eliminar el exceso de grasa. Si deseas un resultado más suave, puedes pasarlos rápidamente por agua caliente antes de colocarlos en la miel; esto ayuda a que absorban mejor el almíbar sin deshacerse.
  5. Preparar la Miel de Panela: En una olla grande coloca el agua, la panela troceada, la canela, la pimienta gorda, los clavos, el anís, la cáscara de limón y el ron (si decides usarlo). Cocina a fuego medio hasta que la panela se disuelva por completo y la mezcla adquiera un color oscuro y un aroma intenso. Deja hervir unos minutos para que las especias liberen su sabor y luego cuela la miel para retirar los restos sólidos. Esta miel es el alma del postre, así que asegúrate de darle tiempo para concentrar el sabor. Si deseas un toque más aromático, puedes añadir una pizca de vainilla o una cáscara de naranja.
  6. Bañar los Molletes en la Miel: Coloca los molletes fritos dentro de la miel caliente, procurando que queden cubiertos hasta la mitad. Cocina a fuego bajo por unos 10 a 15 minutos, bañándolos con una cuchara para que absorban la miel por ambos lados. No los muevas bruscamente para evitar que se deshagan. Apaga el fuego y deja reposar durante al menos 2 o 3 horas para que los molletes se impregnen completamente del sabor del almíbar. Este reposo es fundamental: cuanto más tiempo se dejen en la miel, más suaves y jugosos quedarán.
  7. Servir: Sírvelos tibios o fríos, en platos hondos, bañados con su miel y decorados con pasas y un poco de azúcar roja por encima. Se acompañan tradicionalmente con café o un licor dulce. Los molletes pueden conservarse refrigerados en su miel durante varios días y, con el paso del tiempo, su sabor se intensifica. Es un postre perfecto para compartir en familia, especialmente durante Semana Santa, aunque en Guatemala se disfruta todo el año por su sabor nostálgico y casero.