Molotes oaxaqueños

Los molotes oaxaqueños son uno de los antojitos más deliciosos y tradicionales de la comida mexicana. Originarios de Oaxaca, estos bocadillos combinan lo mejor de la gastronomía popular: una masa de maíz suave y dorada, rellena con un guisado de papa con chorizo, que se fríe hasta quedar crujiente y se sirve con lechuga, queso y salsa de frijol. Su sabor auténtico, textura perfecta y aroma irresistible los convierten en un platillo ideal para compartir en familia o disfrutar en cualquier momento del día.
Además de su exquisito sabor, los molotes oaxaqueños tienen una interesante historia que se remonta a la época colonial, cuando ingredientes europeos y prehispánicos se fusionaron para dar vida a nuevas recetas mexicanas. Con el paso del tiempo, esta preparación se ha mantenido como un símbolo de la identidad culinaria oaxaqueña, conservando su esencia artesanal y su toque casero que enamora a todos los paladares.
Información de la receta
- Tiempo de preparación: 30 minutos
- Tiempo de cocinado: 40 minutos
- Tiempo total: 1 hora 10 minutos
- Raciones: 8-10 molotes
- Categoría: Antojitos
- Tipo de cocina: Mexicana
- Calorías por ración: 350 kcal
Ingredientes
Para la masa
- 1 kilogramo de masa de maíz nixtamalizado (masa para tortillas)
- 100 gramos de harina de trigo o arroz
- 1 cucharadita de polvo de hornear
- 1 cucharadita de sal
- 1 cucharada de aceite vegetal
- ½ taza de agua tibia (ajustar según necesidad)
Para el relleno
- 250 gramos de chorizo oaxaqueño (puede ser de cerdo, pavo o soya)
- 400 gramos de papa cocida y machacada
- 1 chalote o ½ cebolla
- 2 dientes de ajo
- 150 gramos de ejotes (opcional)
- 1 cucharada de aceite vegetal
- Sal y pimienta al gusto
Para freir y servir
- Aceite vegetal suficiente para fritura profunda
- Lechuga orejona o romana rallada
- Rábanos en rodajas
- Queso fresco o Cotija desmoronado
- Salsa de frijol negro espesa
- Salsa picante roja o verde al gusto
- Crema oaxaqueña o crema agria (opcional)
- Cilantro fresco picado (opcional)
Para la salsa cremosa aguacate (opcional)
- 1 aguacate maduro
- ½ jalapeño sin semillas
- 1 diente de ajo
- Jugo de 2 limones
- 1 cucharada de crema agria o crema oaxaqueña
- Sal y pimienta al gusto
Como hacer Molotes oaxaqueños
- Preparar la masa: Coloca en un recipiente grande la masa de maíz nixtamalizado y agrega la harina de trigo o de arroz, según tu preferencia. Añade también la sal, el polvo de hornear y el aceite vegetal. Mezcla con las manos mientras incorporas poco a poco el agua tibia hasta lograr una masa suave, flexible y nada pegajosa. La consistencia ideal es aquella que se puede moldear sin que se agriete; si notas que está seca, agrega unas gotas más de agua. Una vez lista, cubre la masa con un paño húmedo y deja reposar unos 15 minutos para que se relaje y sea más fácil de manejar. Este paso es esencial, pues permite que los molotes no se rompan al freírse y tengan una textura crujiente por fuera pero tierna por dentro.
- Preparar el relleno de papa con chorizo: En una sartén amplia calienta una cucharada de aceite vegetal a fuego medio. Agrega el chorizo oaxaqueño y fríelo durante unos 10 a 12 minutos, moviendo constantemente para que se dore parejo y suelte su grasa natural. Luego añade el chalote o la cebolla junto con los dientes de ajo picados, y sofríe hasta que estén transparentes y fragantes. Incorpora la papa cocida y machacada, mezclando muy bien para que se integre con el chorizo. Sazona con sal y pimienta al gusto y, si deseas darle un toque más tradicional, añade los ejotes previamente cocidos y picados finos, como se acostumbra en algunas regiones rurales de Oaxaca. El resultado debe ser un relleno sabroso, ligeramente húmedo y con un aroma intenso. Deja enfriar un poco antes de usarlo, para que no ablande la masa al rellenar.
- Formar los molotes: Divide la masa en porciones del tamaño de una pelota de golf. Coloca una porción entre dos plásticos dentro de una prensa para tortillas y aplana suavemente hasta obtener un disco de unos 10 a 12 centímetros de diámetro. Si no tienes prensa, puedes hacerlo manualmente presionando con las palmas hasta formar una tortilla gruesa. Coloca una cucharada del relleno de papa con chorizo en el centro y dobla la tortilla a la mitad para cubrir el relleno. Presiona los bordes con los dedos para sellar bien y luego da forma alargada, similar a un cilindro o un balón de fútbol. Es importante cerrar bien los extremos para evitar que el relleno se escape durante la fritura. Si la masa se reseca, humedece ligeramente tus dedos o los bordes con agua para facilitar el sellado.
- Freír los molotes: Calienta abundante aceite vegetal en una cacerola profunda o sartén alta a una temperatura media-alta, alrededor de 180 °C (350 °F). Prueba el aceite colocando un pedacito de masa; si chispea de inmediato, está listo. Coloca los molotes con cuidado, de tres en tres, sin amontonarlos para que se frían parejo. Cocina durante 4 a 6 minutos, volteándolos ocasionalmente hasta que estén dorados y crujientes por fuera. Sácalos con una espumadera y colócalos sobre papel absorbente para retirar el exceso de aceite. Si prefieres una versión más ligera, puedes hornearlos a 200 °C durante unos 25 minutos, rociándolos previamente con un poco de aceite en spray; quedarán menos grasosos pero igualmente sabrosos. En ambos casos, la clave es que la masa quede firme y dorada, con una textura exterior crocante que contraste con el relleno suave.
- Preparar la salsa de aguacate (opcional): Mientras los molotes reposan, prepara una salsa cremosa de aguacate. En la licuadora coloca el aguacate, el jalapeño, el diente de ajo, el jugo de limón, la crema y una pizca de sal y pimienta. Procesa hasta obtener una salsa suave y homogénea. Esta salsa fresca equilibra el sabor del chorizo y aporta una nota cremosa que combina a la perfección con los molotes. Cúbrela con plástico de cocina directamente sobre la superficie para evitar que se oxide y reserva en refrigeración hasta el momento de servir.
- Servir los molotes oaxaqueños: Coloca los molotes recién fritos directamente en el plato y empieza a montar los ingredientes encima. Primero, vierte una capa generosa de salsa de frijol negro espesa y salsa cremosa de aguacate sobre los molotes calientes, permitiendo que se impregnen ligeramente sin ablandarse demasiado. Luego distribuye por encima la lechuga orejona rallada, de manera que cubra parte de cada molote, y añade algunas rodajas finas de rábano para dar color y frescura. A continuación, baña todo con un poco de salsa picante roja o verde, según tu preferencia, y espolvorea abundante queso fresco o Cotija desmoronado por encima. Si lo deseas, agrega un toque de crema oaxaqueña para equilibrar el picante y finaliza con unas hojas de cilantro picado. En Oaxaca es común disfrutar estos molotes durante las fiestas patronales o en la merienda con una taza de atole de elote o champurrado.