Chocao panameño
El chocao panameño es uno de los postres más representativos de la provincia de Darien, una región abundante en naturaleza donde el platano y el guineo han sido cultivos esenciales desde tiempos ancestrales. Esta preparación, llena de aroma y tradición, forma parte de la comida tipica darienita y se caracteriza por su sencillez y profundo sabor casero. Su origen está ligado a la historia culinaria de los pueblos indígenas, quienes aprovechaban al máximo la riqueza agrícola de la zona, especialmente el platano maduro, ingrediente clave para lograr la textura cremosa y el dulzor natural que distinguen este postre.
El chocao se prepara tradicionalmente con plátano muy maduro, jengibre fresco y leche de coco, una combinación irresistible que perfuma la cocina mientras se cocina lentamente. Hoy en día, sigue siendo una delicia que se transmite generación tras generación, disfrutada en platos hondos y ajustada en consistencia según el gusto familiar. Esta receta mantiene viva la esencia del Darién y continúa conquistando paladares con su sabor auténtico, perfecto para quienes buscan postres tradicionales con raíces profundas.
Información de la receta
- Tiempo de preparación: 10 minutos
- Tiempo de cocinado: 25 minutos
- Tiempo total: 35 minutos
- Raciones: 6 porciones
- Categoría: Postre
- Tipo de cocina: Panameña
- Calorías por ración: 280 kcal
Ingredientes
- 6–8 plátanos muy maduros (cáscara casi negra)
- 4 tazas de leche de coco
- 1 trozo de jengibre
- 2–3 ramas de canela
- Miel o azúcar al gusto
- 1 pizca de sal
- ½ taza de leche evaporada o crema de coco (para servir)
Como hacer Chocao panameño
- Preparar los plátanos: Pela los plátanos y córtalos en trozos medianos, ya que esto ayuda a que se cocinen uniformemente y se deshagan con facilidad durante la cocción. Si deseas un chocao más rústico y tradicional, puedes estrujarlos con las manos en lugar de cortarlos, lo cual aporta una textura cremosa y casera muy típica. Es importante usar plátanos con la cáscara casi negra, porque entre más maduros estén, más dulce queda el resultado final sin necesidad de agregar tanta azúcar.
- Blanquear los plátanos: Coloca los plátanos en una olla con agua hirviendo y cocínalos durante tres minutos para suavizarlos y permitir que absorban mejor los sabores del chocao. Este paso también ayuda a que la mezcla final tenga una consistencia más cremosa y a que los aromas se integren más fácilmente después. No saltes este paso, ya que mejora notablemente la textura.
- Aromatizar con jengibre y canela: Agrega el jengibre picado finamente y las ramas de canela al agua donde están los plátanos, permitiendo que el calor libere sus aromas. El jengibre es esencial para el sabor auténtico panameño, pues aporta un toque fresco que equilibra el dulzor natural del plátano. La canela, por su parte, perfuma el fondo del chocao desde el inicio, dándole el carácter tradicional que distingue esta preparación. Deja que hiervan un par de minutos para que el líquido se impregne bien de ambos ingredientes.
- Incorporar la leche de coco: Vierte las cuatro tazas de leche de coco sobre la mezcla y revuelve para integrar todo. La leche de coco es responsable de la riqueza y cremosidad del chocao, así que es ideal usar una leche de buena calidad o una hecha en casa. En este paso también añade la pizca de sal, ya que realza el dulzor natural de los plátanos y equilibra el sabor general del postre. Mantén la cocción a fuego medio mientras remueves ocasionalmente para evitar que se pegue.
- Espesar y lograr la textura del chocao: Cocina la mezcla hasta que los plátanos se deshagan parcialmente y la preparación adquiera una textura espesa, cremo-sa y ligeramente aguachada, como debe ser el chocao tradicional. Si prefieres una consistencia más espesa, puedes machacar algunos plátanos dentro de la olla; si la quieres más liviana, añade un poco más de leche de coco. Endulza con miel o azúcar al gusto, recordando que el plátano muy maduro ya aporta buena cantidad de dulzor natural. La cocción suele tardar de 15 a 20 minutos, dependiendo del grado de madurez de la fruta.
- Finalizar y servir al estilo panameño: Sirve el chocao caliente en platos hondos o cuencos y agrega encima un chorrito de leche evaporada o crema de coco para darle brillo, sabor y suavidad adicional. Esta adición final es muy usada en Panamá y realza notablemente la cremosidad del postre. Recuerda retirar las ramas de canela antes de servir para que no interfieran al comer.