Colchón de arvejas

Colchón de arvejas casero
Receta de colchón de arvejas

El colchón de arvejas es una receta tradicional de la cocina argentina que combina sencillez, sabor y recuerdos familiares. Este plato casero, preparado con arvejas verdes, tomate, cebolla y especias suaves, representa ese tipo de comida reconfortante que se transmite de generación en generación. Su base vegetal se cocina lentamente hasta lograr una textura tierna y sabrosa, creando el fondo perfecto para coronar con huevo entero, que se cocina suavemente hasta alcanzar el punto justo de la yema.

Ideal para una comida diaria, el colchón de arvejas destaca por ser una receta facil, económica y muy versátil. Puede prepararse en sartén o adaptarse al horno, y admite agregados como queso, papas o incluso embutidos, sin perder su esencia. Es una opción nutritiva, rica en proteínas vegetales, perfecta para disfrutar caliente, con pan o como plato principal lleno de sabor y hogar.

Información de la receta

  • Tiempo de preparación: 15 minutos
  • Tiempo de cocinado: 25 minutos
  • Tiempo total: 40 minutos
  • Raciones: 4
  • Categoría: Plato principal
  • Tipo de cocina: Argentina
  • Calorías por ración: 320 kcal

Ingredientes

  • 1 cebolla grande
  • 1 zanahoria mediana
  • 1 pimiento rojo mediano
  • 2 dientes de ajo
  • 100 g de panceta (opcional)
  • 400 g de arvejas cocidas
  • 400 g de tomate triturado o tomate perita al natural
  • 4 huevos
  • 1 cucharadita de pimentón dulce
  • Ají molido o chile, a gusto
  • Pimienta negra, a gusto
  • Sal, cantidad necesaria
  • Aceite, cantidad necesaria
  • Perejil fresco (opcional)
  • Queso cremoso o queso rallado (opcional)

Como hacer colchón de arvejas

  1. Sofrito base: Calentar una sartén amplia y profunda con tapa a fuego medio y agregar un chorro de aceite. Cortar la cebolla en pluma o picarla, según preferencia, y colocarla en la sartén. Agregar una pizca de sal para que liberen sus jugos y cocinar lentamente hasta que estén bien transparentes y suaves, sin apurarlas, ya que este paso define el sabor final del plato.
  2. Incorporación de aromas y vegetales: Picar los dientes de ajo y agregarlos al sofrito, mezclando de inmediato para que no se quemen. Cortar el pimiento en tiras finas y rallarle la zanahoria directamente a la sartén. Cocinar todo junto durante unos minutos, revolviendo, hasta que los vegetales estén tiernos y bien integrados, cuidando que el fuego no esté demasiado alto.
  3. Dorado opcional para más sabor: Si se utiliza panceta, correr los vegetales hacia un costado de la sartén y agregarla cortada en tiras o cubos. Dorarla bien hasta que esté crocante y haya soltado su grasa, luego mezclarla con el resto del preparado. Este paso es opcional, pero aporta profundidad y un perfil más tradicional al colchón de arvejas.
  4. La salsa de tomate: Agregar el tomate triturado o los tomates perita previamente desmenuzados con su jugo. Condimentar con pimentón dulce, pimienta y ají molido o chile a gusto. Mezclar, tapar la sartén y dejar cocinar a fuego medio-bajo durante unos 8 a 10 minutos, permitiendo que la salsa se espese y se concentren los sabores. En este punto se puede ajustar la sal.
  5. Suma de las arvejas: Incorporar las arvejas cocidas, previamente escurridas si son de lata. Mezclar con cuidado y cocinar destapado durante unos minutos para que se integren bien y el conjunto no quede aguado. La preparación debe quedar jugosa pero espesa, ideal para sostener los huevos sin que se hundan.
  6. Formación del colchón y huevos: Con una cuchara, hacer huecos bien marcados en la preparación y cascar un huevo en cada uno. Salpimentar apenas cada huevo. Tapar la sartén, bajar el fuego al mínimo y cocinar entre 4 y 6 minutos, según el punto deseado; la clara debe coagular y la yema puede quedar más o menos cremosa según gusto. Si se desea, en este momento se pueden agregar trozos de queso alrededor de los huevos para que se fundan suavemente.
  7. Terminación y servicio: Apagar el fuego, espolvorear con perejil fresco picado y dejar reposar un minuto antes de servir. El colchón de arvejas se sirve bien caliente, idealmente en la misma sartén, acompañado con pan fresco, arroz blanco o papas hervidas, aprovechando la salsa y la yema para mojar.