Tallarines a la huancaína con lomo saltado
Los tallarines a la huancaína representan una de las combinaciones más queridas de la gastronomía peruana, donde la pasta se funde con una salsa cremosa, intensa y llena de carácter. Esta preparación destaca por su equilibrio entre suavidad y sabor, gracias a una crema elaborada a base de ají amarillo, queso fresco y leche, que envuelve cada hebra de pasta y convierte el plato en una experiencia reconfortante. Su versatilidad permite usar distintos tipos de pasta larga, manteniendo siempre la esencia tradicional que conquista paladares dentro y fuera del Perú.
Los tallarines a la huancaína con lomo saltado nacen de la creatividad criolla al unir dos clásicos en un solo plato lleno de identidad. El salteado jugoso y aromático del lomo saltado aporta fuerza, textura y profundidad de sabor, contrastando de manera perfecta con la untuosidad de la huancaína. El resultado es una receta completa, sabrosa y muy apreciada, ideal para quienes buscan platos tradicionales, contundentes y con alto valor gastronómico.
Información de la receta
- Tiempo de preparación: 30 minutos
- Tiempo de cocinado: 25 minutos
- Tiempo total: 55 minutos
- Raciones: 4
- Categoría: Plato principal
- Tipo de cocina: Peruana
- Calorías por ración: 720 kcal
Ingredientes
Para los tallarines
- 400 g de tallarines o espaguetis
- Agua suficiente
- Sal al gusto
Para la salsa huancaína
- 5 ajíes amarillos
- 2 dientes de ajo
- 300 g de queso fresco
- 10 galletas de soda
- 2 tazas de leche evaporada
- 1/2 taza de aceite vegetal
Para el lomo saltado
- 600 g de lomo de res
- 2 cebollas rojas
- 2 tomates
- 6 cucharadas de sillao (soya)
- 2 cucharadas de vinagre de manzana
- 2 cucharadas de salsa inglesa
- Pimienta negra al gusto
Como hacer Tallarines a la huancaína con lomo saltado
- Cocción de los tallarines: Pon abundante agua a hervir con sal y cocina los tallarines siguiendo el tiempo indicado en el paquete hasta que queden al dente. Escúrrelos y resérvalos calientes; es importante no sobrecocerlos, ya que luego se integrarán con la salsa y podrían ablandarse en exceso.
- Preparación del ají amarillo: Limpia los ajíes retirando venas y semillas para controlar el picor. Hiérvelos durante unos minutos hasta que estén suaves; este paso es clave para lograr una huancaína equilibrada y de color intenso. Escúrrelos bien antes de continuar.
- Sofrito base de la huancaína: En una sartén a fuego medio, calienta parte del aceite y sofríe los ajíes previamente hervidos junto con los dientes de ajo hasta que desprendan aroma, sin dorarlos en exceso. Retira del fuego y deja entibiar, ya que licuarlos calientes puede alterar la textura de la salsa.
- Licuado de la salsa huancaína: Coloca en la licuadora el sofrito de ají y ajo, el queso fresco, las galletas de soda y la leche evaporada poco a poco. Licúa hasta obtener una salsa espesa, lisa y cremosa. Ajusta la sal y, si la notas demasiado espesa, añade un poco más de leche; si está muy líquida, incorpora más galleta.
- Calentado de la huancaína: Pasa la salsa a una olla y caliéntala a fuego bajo, removiendo constantemente. La huancaína nunca debe hervir, ya que el queso podría cortarse; solo debe calentarse suavemente hasta quedar sedosa y brillante.
- Integración de los tallarines: Agrega los tallarines cocidos a la olla con la salsa caliente y mezcla con cuidado durante uno o dos minutos para que se impregnen bien. Este paso permite que la pasta absorba el sabor sin perder su textura.
- Sellado del lomo: Corta la carne en tiras gruesas y salpimienta ligeramente. En un wok o sartén bien caliente con aceite, saltea el lomo a fuego alto por poco tiempo para sellarlo y mantenerlo jugoso. No lo remuevas en exceso para evitar que pierda jugos.
- Salseado criollo del lomo: Incorpora el sillao, el vinagre y la salsa inglesa. Saltea brevemente para que la carne se glasee; este paso aporta el sabor intenso y característico del lomo saltado tradicional.
- Salteado final con verduras: Agrega la cebolla cortada en pluma y el tomate en gajos. Saltea solo unos segundos a fuego alto, manteniendo las verduras crujientes y frescas. Retira inmediatamente del fuego para conservar el contraste de texturas.
- Emplatado: Sirve una porción generosa de tallarines a la huancaína bien calientes y acompaña con el lomo saltado al costado o encima, según preferencia. El equilibrio entre la cremosidad suave de la huancaína y la intensidad salteada del lomo es la esencia de este plato.