Tiritas de pescado

Tiritas de pescado
Receta de tiritas de pescado

Las tiritas de pescado son un platillo emblemático de la costa del Pacífico mexicano, con origen en Guerrero, específicamente en Zihuatanejo, donde nacieron hace poco más de cuatro décadas entre capitanes de embarcaciones pesqueras. Ante la falta de ingredientes para preparar un ceviche tradicional, estos pescadores improvisaron una botana sencilla pero memorable: pescado fresco cortado en finas tiras, curado únicamente con limon, sal y cebolla. La simplicidad de su preparación permitió resaltar el sabor puro del mar, convirtiéndose rápidamente en una receta popular que hoy es símbolo de identidad regional.

Con el paso del tiempo, la receta evolucionó sin perder su esencia, incorporando de forma opcional ingredientes como chile, pepino, cilantro y acompañamientos clásicos como tostadas, galletas saladas o totopos. En muchas mesas también se sirve con rebanadas de aguacate, aportando frescura y contraste. Actualmente, las tiritas de pescado se disfrutan tanto en pangas de pescadores como en restaurantes de prestigio, consolidándose como uno de los antojitos marinos más representativos y solicitados de la región.

Información de la receta

  • Tiempo de preparación: 20 minutos
  • Tiempo de cocinado: 0 minutos
  • Tiempo total: 20 minutos
  • Raciones: 4
  • Categoría: Entrante
  • Tipo de cocina: Mexicana
  • Calorías por ración: 210 kcal

Ingredientes

  • 1 kilo de filete de pescado fresco (pez vela, marlín, dorado, barrilete o tilapia)
  • 15 a 20 limones
  • 2 cebollas moradas grandes
  • Sal de mar o sal de grano al gusto
  • 1 a 2 chiles habaneros o chiles serranos
  • 1 pepino
  • 1 manojo pequeño de cilantro
  • Pimienta al gusto
  • Orégano seco mexicano al gusto

Para acompañar

  • Tostadas de maíz
  • Totopos
  • Galletas saladas
  • Aguacate
  • Salsas picantes (opcional, al servir)

Como hacer Tiritas de pescado

  1. Preparación del pescado: Coloca el filete de pescado sobre una tabla y retira cuidadosamente cualquier nervio o parte oscura. Córtalo en tiritas largas y delgadas siguiendo la veta del filete, lo que permite que mantengan su forma y textura. Una vez cortado, colócalo en un recipiente amplio de vidrio y espolvorea sal de mar, mezclando suavemente con las manos para que se distribuya de manera uniforme sin maltratar el pescado.
  2. Incorporación de la cebolla y el chile: Corta la cebolla morada en rebanadas muy delgadas y agrégala al pescado ya salado. Si decides usar chile, retírale las semillas y pícalo finamente o córtalo en tiras delgadas, incorporándolo en este momento según tu tolerancia al picante. Mezcla suavemente para integrar los ingredientes, permitiendo que la cebolla comience a suavizarse con la sal.
  3. Curado con cítricos: Exprime los limones directamente sobre la mezcla, uno por uno, hasta cubrir completamente el pescado. El jugo debe ser suficiente para que las tiritas queden sumergidas y comiencen a cambiar de color. Mezcla ligeramente y deja reposar durante unos minutos; notarás cómo el pescado pasa de un tono translúcido a blanco, señal de que se está curando correctamente con el ácido del limón, sin necesidad de calor.
  4. Ajustes y agregados finales: Prueba la preparación y ajusta de sal si es necesario. Si se desea, incorpora en este punto el pepino cortado en cubos pequeños sin semillas para aportar frescura, así como un poco de cilantro picado, pimienta u orégano seco mexicano. Estos ingredientes son tradicionales en algunas regiones, pero siempre se agregan con moderación para no opacar el sabor natural del pescado.
  5. Reposo y punto ideal: Deja reposar las tiritas entre 5 y 20 minutos, según el grosor del pescado y el gusto personal. El punto ideal se reconoce cuando el pescado está completamente blanco por fuera, pero aún jugoso por dentro. Un reposo excesivo puede endurecer la textura, por lo que se recomienda consumirlas poco después de su preparación.
  6. Servicio tradicional: Sirve las tiritas de pescado recién hechas acompañadas de tostadas, totopos o galletas saladas. Al momento de comer, se pueden agregar rebanadas de aguacate y, opcionalmente, unas gotas de salsa picante. Tradicionalmente se disfrutan frías, recién curadas, resaltando el sabor limpio del mar sin sobrecargar la preparación.